
Es tímida y siempre esta acompañada de alguien que la proteja y asegure que todos los participantes guardaran el secreto de no contarle a su mamá y a su hermano lucho todo lo que le causa rabia, miedo, tristeza y las pequeñas cosas que le causan alegría
Anita, llega con su sentir dramático buscando no solo el dolor en su corazón sino también el dolor colectivo, encontrando siempre la respuesta mas sencilla que alivia e invita por un momento o tal vez por mucho tiempo abrir el corazón, para restablecer nuevas formas de contacto y vínculos, buscando siempre la armonía entre el sentir, pensar y actuar.
Después de muchos minutos el corazón de todos los que la conocen están hechizados de sentimientos, con ganas de vivir, de soñar, seguir amando a los suyos y con mucha pena por la vida, pues ella sin recriminarnos nos invita a vivir la vida desde lo que somos y no desde las situaciones que nos ha tocado vivir.